Soy Cristina Calcerrada, dietista-nutricionista y en esta entrada te explicaré tres conceptos clave para poder plantearnos objetivos reales y alcanzables.
Hace poco leí una frase que me gustó mucho, venía a decir algo como «un propósito sin un plan, no es más que un sueño» (se inspiraba en uno de los textos del célebre Antoine de Saint-Exupéry). Por tanto, si de verdad tenemos un propósito, ¡tenemos que tener claro el objetivo!
En consulta, muchas veces escuchamos «yo vengo a bajar peso», «yo vengo a subir peso», «yo quiero sentirme más definido», «yo quiero aprender a comer» . Pero, ¿somos conscientes realmente de los cambios que implica lo que queremos? ¿o hemos llegado sin saber muy bien cómo o por presión social hasta allí?
Cuando de verdad estamos motivados a hacer un cambio físico, también tiene que acompañarse con un cambio mental y de hábitos de vida.
¿Cómo planteamos un objetivo para que realmente sea eficaz? Los tres conceptos que serán la clave: medible, motivante y flexible. Vamos a ver a continuación cada uno con más de detalle y de forma práctica.
1) Medible. Pero no siempre basado en números. Lo primero que todos los profesionales intentamos transmitir es que el número de la báscula no es lo más importante, lo importante es cómo te sientes tú. ¿Cómo puedes medir que estás avanzando? ¿Qué cosas crees que vas a poder hacer o sentir que ahora mismo no?
2) Motivante. Para ti, de verdad. Hay quien por una celebración busca un determinado físico o talla para desempolvar un viejo atuendo o asistir a un evento. Ojo, que no está mal para motivarnos, pero busca dentro de ti algo más. ¿De verdad te gustaría ese cambio solo para ese día? ¿No te encontrarías mejor así? ¿Por qué te encontrarías mejor que ahora? ¿Qué ventajas tendrá mantenerlo en el tiempo?
3) Flexible. Muy importante. No podemos caer en la frustración porque el camino y el final no salgan al dedillo de lo que habíamos planeado. Si nos quedamos en las puertas del objetivo o tardamos un par de meses más en conseguirlo, ¡tampoco pasa nada! Distingue entre esfuerzo y resultado. ¿Por qué? No todo es esfuerzo, pero saber que lo hacemos lo mejor que podemos con las circunstancias que tenemos, sí es superación (creo que es mi frase más repetida en consulta).
Espero haberte ayudado y que a partir de ahora fijarse objetivos sea una tarea más consciente y motivante.
Basado en post original Instagram @cristinacdnut – 8 septiembre 2020
Me ha encantado mucho Cris.
¡Me alegro! Gracias por dejarme tu comentario Italia 😉